“La preocupación que tuvimos al diseñar [el Conjunto Habitacional Palomino] fue que con un elemento unitario de vivienda no se tuviera una monotonía en el conjunto tanto en la disposición de los bloques como en el tratamiento y el color de las viviendas, que la gente no se sintiera viviendo en un mismo elemento repetido unas mil veces. Luego pretendimos urbanísticamente crear una escala que fuera un poco más acogedora, que la Unidad Vecinal N° 3 por ejemplo, que realmente no tiene espacios a niveles de barrio; tratando de crear un sentido de comunidad pequeña; pero yo no sé si habrá resultado o no.”
p. Hay una cosa que sucede en las unidades vecinales, muy a menudo, es el cambio de las fachadas. En Palomino por ejemplo, pintarlas, ponerle rejas o tejas o ponerle cosas así.
“Efectivamente, pero desgraciadamente no sé cómo se puede solucionar. Nosotros tratamos de que fueran menos visibles; creamos dos planos de color, digamos un plano que es todo blanco y sobre otro fondo jugar con colores o viceversa, con lo cual inclusive, cuando algunos ocupantes cambiaron el color de su casa, aunque fuera distinto, no fuera notorio. De todas maneras, no iba a ser tan chocante, y al mismo tiempo habría la posibilidad de reducir esa tendencia que se ha notado, de los cambios de colores y agregados.
Allí justamente se nota que todavía hay un sentido individualista de las gentes, porque si usted observa, cada uno ha hecho su propio jardín delante de su departamento, le ponen cerquitas alrededor, lo limitan como si fuera propio, aunque no les pertenece porque ellos no lo han comparado, es un jardín común, pero sin embargo tienden a delimitarlo y lo cuidan inclusive, son los más cuidados, pero de todas maneras hay una necesidad de independizarse y de individualizarse, tanto por color o por la reja, diferenciarse del resto de la gente.”
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Sobre la intención de socializar.
“En el caso de Palomino, creamos dos elementos, no sé si funcionan o no. Uno era una especie de club social, con una serie de salones, una especie de bar, etc. que se suponía pudiera servir para bailes sociales, los sábados en la noche o cualquier otro día, o para cualquier celebración, y junto a los anteriores, con una escalera que se abre en dos accesos y que se comunique con el bar que quedaba intermedio, un local funcional de formación comunitaria, ya no de diversión o recreación, si no de formación, con aulas para que pudieran hacer clases de costura para señoras, reuniones de asociaciones o de clubs deportivos. Inclusive 3 oficinitas en caso de que se formara una agrupación de esta naturaleza o un periódico de la Unidad y un saló o sala de actos. Por mucho tiempo la sala de actos ha servido de capilla por no haberse construido la iglesia. Yo creo que se han hecho muchos esfuerzos, pero no creo que los resultados hayan sido del todo positivos, creo que en el fondo, como todo lo humano, la arquitectura es más bien un producto y va a reflejar el estado de la sociedad según lo determinado por otros factores.”
Valladares Osso, Carlos; Ventocilla Cuadros, Eleodoro (1973) Para una concepción de la vivienda de interés social. Trabajo de investigación para optar por el título profesional de Arquitecto.
Universidad Nacional de Ingeniería. Facultad de Arquitectura, Urbanismo y Artes.