"En primer lugar, es evidente que el contexto de la crítica es el de la geografía de la democracia, el de los territorios en libertad. Sólo hace falta ver cuáles son los lugares donde se han desarrollado estas tradiciones críticas o donde existen los grandes museos y las grandes editoriales de temas artísticos. Ningún país, sin un vital y consolidado proceso democrático, puede aspirar a generar ninguna propuesta relevante en el campo de la crítica artística. [...]
Historia, crítica y teoría se complementan y son, a la vez, totalmente distintas en sus métodos y objetivos. La historia trabaja sobre los documentos del pasado para reconstruir y reinterpretar los hechos. La crítica afronta la obra contemporánea, en su momento y contexto, para explicarla. La teoría constituye la más alta elaboración conceptual, es excepcional y no se puede hacer sin el conocimiento de la historia, ni se puede sustentar si no se pone a prueba con la crítica. Asimismo, en toda crítica ha de haber detrás, para que sea consistente, una teoría.
Deberíamos añadir que crítica, teoría e historia, a pesar de utilizar métodos distintos y tener objetivos propios, beben de las mismas fuentes; tal como señaló Benedetto Croce, son inseparables. La historia ha de ser siempre contemporánea, no pudiéndose separar de su identidad crítica, de la interpretación y el juicio de los valores estéticos. En este sentido, es evidente que en la cultura latina (en el arco Mediterráneo y en Latinoamérica) han predominado autores dedicados a la vez a la crítica y a la historia y, en cambio, en culturas centroeuropeas y nórdicas (especialmente Alemania e Inglaterra, incluyendo Madrid) se ha disociado claramente el trabajo de la crítica del de la historia.
Para el estudio de los fenómenos arquitectónicos y urbanos es básico, desde el punto de vista del método, tener en cuenta la cultura arquitectónica en tres ámbitos:
- La enseñanza: es decir, conocer las distintas tradiciones de las escuelas y facultades de Arquitectura; su evolución desde las ingenierías o las bellas artes a las escuelas de arquitectura; sus fundadores y teóricos más importantes; sus ideas, métodos y planes de estudios.
- La Difusión: es decir, el mundo editorial y las revistas de arquitectura, arte y cultura. El mundo editorial ha sido muy importante en Argentina [...] también se ha desplazado hacia México, Venezuela, Brasil y Colombia. Ello es clave para la difusión de la cultura arquitectónica.
- El Pensamiento: es decir, la transmisión de las ideas a través de las posiciones teóricas utilizando distintos medios de expresión y difusión."
Montaner, J. M. (2011) Arquitectura y crítica en Latinoamérica. Buenos Aires: Nobuko. pp 19-20.
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